Este año han prohibido beber alcohol dentro del recinto de disfraces, incluso han puesto vallas evitando el descontrol que pueda sucederse, y evitando también con guardias la entrada a la playa a jóvenes que vayan con bebidas.
El año pasado todo estaba organizado, como en Xairo no hay la capacidad de acoger a tanta gente, se había habilitado un recinto con música, dos barras enormes de cincuenta metros, aseos, policía, ambulancias.... y la fiesta transcurrió sin incidentes a destacar.
Este año nos sorprende Xairo en su página de Facebook con este mensaje:
“El Ayuntamiento pidió que difundiéramos este mensaje “ El Ayuntamiento de Orihuela advierte que NO autoriza la concentración ni la consumición de alcohol en lugares públicos, ajustándose a la Ley Valenciana y sancionando a todo aquel que lo incumpla”.
La Concejalía de Festejos del Ayuntamiento de Orihuela nos comenta que no tiene ninguna comunicación oficial, que solo han oído rumores y que este tema lo lleva directamente la concejala de costas, Martina Scheurer, con el propio Alcalde.
Una funcionaria del Ayuntamiento comenta que hay una orden de la policía, y ésta dice lo siguiente: “no tenemos ninguna solicitud en este Ayuntamiento”, “no se consiente ninguna concentración de personas” y por supuesto “el botellón está prohibido”. Alega una Ley Valenciana que les limital. Si tienen que sancionar a cinco personas lo harán,como si tienen que sancionar a cinco mil personas, les da lo mismo.
Recordamos los posible perjuicios económicos para los comerciantes de Campoamor ya que esa fiesta puede ser un importante fuente de ingresos. Este tema según ellos no es relevante y nos vuelve a remitir a la Ley Valenciana que les limita mucho.
La gerencia de Xairo nos comentan las reuniones que han tenido con la Concejala de Costas y con el Alcalde para la organización de este evento, con la negativa de éstos a realizarla : la oportunidad perdida para que todos los locales de Campoamor puedan disponer de unas barras en el recinto y dar servicio a los visitantes, incluso pagando una licencia que sirviera para cubrir los gastos de la fiesta.
Nos recuerda que hace varios años el Ayuntamiento cometió el error de prohibir la fiesta, acordonó la playa y la pradera y llenó de policía Campoamor. Xairo se cerró por un tema formal de licencia. El resultado fue botellón salvaje y descontrolado por toda la urbanización y algunos incidentes desagradables con la autoridad.
La fiesta de disfraces de Campoamor es un evento de mucha importancia que atrae a esta urbanización a miles de personas, y que si se regulara adecuadamente y se permitiera que nuestros comerciantes y locales de copas pudieran tener presencia seguro que todo discurriría sin incidentes.
Deseamos que el Carnaval de Xairo sea todo un éxito, es una fiesta legal aunque no esté permitido la consumición de alcohol en el exterior, nosotros pensamos participar.
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